Apenas dos semanas después de haber anunciado una baja del 4% en los precios de sus combustibles, YPF sorprendió al mercado con un nuevo aumento que ronda los $6 por litro. La medida, implementada este miércoles, responde a la necesidad de la petrolera estatal de ajustar sus márgenes en un contexto de costos crecientes y demanda fluctuante.
El presidente de YPF, Horacio Marín, explicó que la compañía está explorando estrategias para mejorar la rentabilidad en franjas horarias y zonas de baja demanda. Una de las iniciativas en estudio es la implementación de sistemas de autodespacho en estaciones de servicio, lo que permitiría reducir costos operativos y ofrecer precios más competitivos durante horarios nocturnos.
Este nuevo aumento se suma a una serie de ajustes que las petroleras vienen realizando en los últimos meses, en un intento por equilibrar la estructura de costos frente a variables como el precio internacional del crudo, el tipo de cambio y la carga impositiva.
La volatilidad en los precios de los combustibles genera incertidumbre tanto en consumidores como en sectores productivos que dependen del transporte. Mientras tanto, el Gobierno evalúa medidas para mitigar el impacto de estos aumentos en la inflación y en el bolsillo de los argentinos.